5 paisajes que se ven y se viven en la Costa Brava

La Costa Brava es sinónimo de lujo, gastronomía, pueblos con encanto… Pero, sobre todo, de espectaculares paisajes mediterráneos. Si queréis guardar un recuerdo inolvidable no sólo tiene que verlos, sino vivirlos.

A continuación os proponemos 5 rincones imprescindibles y 5 formas de descubrirlos.

Nadada matinal en Aiguablava

La cala de Aiguablava es una de las más famosas de la Costa Brava, sus aguas transparentes se extienden en una paleta de azules, cambiando según la luz y la profundidad hasta la vecina cala Malaret. El Hotel Aigua Blava y el Parador de Aiguablava están situados a ambos lados de este espacio único.

¿Nuestra propuesta? Levantarse con el primer sol de la mañana y nadar entre la cala Malaret y la cala de Aiguablava. Nada comparable a un nado vigorizante cuando el mundo todavía está en calma y el mar parece acabado de estrenar, preparado sólo para ti.

La travesía ocupa unos 25 minutos, después de descansar un rato podremos volver a nadar a pie o por el camino que une las dos calas. Imprescindible recuperar fuerzas con un fantástico desayuno en nuestro hotel, con vistas sobre el recorrido que acabamos de realizar.

Si os atrae la idea pero no estáis suficientemente en forma, lo podéis hacer en pádel surf, una opción que también nos enamora.

El Empordanet en bicicleta

El paisaje ampurdanés con campos de cultivo, pueblos medievales, viñas y colinas con el mar al fondo, encuentra toda su esencia en el Empordanet, la Toscana catalana, un territorio que parece pensado para ser recorrido en bicicleta.

Desde el Mas de Torrent Hotel & Spa nos aseguran que la bicicleta es una de las experiencias más demandadas y, aunque la red de caminos es extensa y bien señalizada, nos recomiendan elegir una ruta guiada, no por el riesgo de perdernos, sino por el placer de que un experto nos acompañe e interprete todo lo que vemos.

Nosotros os proponemos un itinerario apto para todos que sale de Torrent y pasa por Pals, Palau Sator, Peratallada y Sant Feliu de Boada. En poco más de 20 kilómetros veremos cuatro de los pueblos medievales más significativos de la zona, a los que llegaremos por caminos rurales.

Aunque el itinerario se realiza en menos de dos horas es imprescindible hacerlo con tiempo y detenerse por el camino a disfrutar del entorno y la paz del corazón del Empordà.

Senderismo y vías ferratas en Cadiretes

En nuestra selección de paisajes para vivir no puede faltar la propuesta que nos hacen desde el Hotel Mas Tapiolas Country Lodge, que situado en el valle de Solius goza del privilegio de ser uno de los puntos de salida para visitar los espectaculares Carcaixells d’en Dalmau .

No nos extraña que sea uno de sus fuertes: estas formaciones graníticas de vertientes desnudas y escarpadas configuran una espina dorsal que emerge del bosque mediterráneo y forma uno de los paisajes ampurdaneses más espectaculares y desconocidos.

El sendero que sigue la cresta tiene varios tramos ferrados de dificultad moderada pero de buen hacer, aunque no aptos para personas con vértigo, y ofrece vistas espectaculares de los Pirineos, la Ardenya, Gavarres y la Costa Brava.

El itinerario completo, de unos 12 kilómetros, llega hasta la cima del Montclar, que es el punto más alto de la Ardenya y un mirador de lujo.

Os recomendamos vivamente hacerlo con un guía para no perderse ninguna de las sorpresas que esconde el itinerario, que incluye desde un menhir hasta una cueva y un oratorio.

El Cabo de Creus debajo del mar

Es el parque natural más reciente creado en la Costa Brava, que puede enorgullecerse de contar con extensas zonas marítimas y terrestres protegidas a lo largo de su territorio.

El paisaje de escarpadas calas, rocas afiladas y vegetación adaptada a condiciones durísimas es y ha sido un escenario que ha cautivado a escritores y pintores entre los que los ampurdaneses más universales como Pla o Dalí.

Aunque habitualmente se visita a pie o navegando, desde el Hotel Spa Terraza de Roses nos proponen ir un poco más allá y hacerlo debajo del mar, ya que sus fondos marinos espectaculares son especial objeto de protección del parque.

Os recomendamos especialmente descubrir los fondos del Gat del cabo Norfeu, una inmersión estrella para todos los niveles, donde encontraréis una increíble vida submarina. Desde gorgonias hasta meros, todo un emblema de la Costa Brava.

Música en los jardines botánicos

¿Vamos demasiado fuertes? ¿Buscáis experiencias más relajadas? La Costa Brava acoge varios jardines botánicos de gran renombre, que en verano podemos vivir de forma distinta.

Desde el Hotel Rigat Park & Spa nos proponen descubrir los jardines de Santa Clotilde – un verdadero jardín romántico situado en un espectacular acantilado sobre el mar, que mezcla pinos, tilos, álamos, cipreses con fuentes, escalinatas y elementos escultóricos , siempre con el mar al fondo – y hacer coincidir la visita con el festival de música que se celebra cada verano.

Si os gusta la idea y deseáis repetir, el Festival de Cap Roig se celebra también en verano en los jardines del mismo nombre, con un cartel internacional y un entorno inmejorable.